nos dicen......

Analicemos un poco a qué se refieren los fieles seguidores de este gobierno con los gastados términos “hijos de papi”, “culitos rosados”, “caras rosadas, cheles “, “apestosos a perfume Chanel” (reconozco la creatividad en este último), “oligarcas”, y un sin número de calificativos que no se si tomarlos como ofensa o un simple chiste.
Primerito que todo estoy consciente de que si soy una mantenida porque aun estoy estudiando para poder adquirir un título y poder trabajar en el futuro. Eso en ningún momento me hace hija de Papi o Mami (mucho menos Papi porque resulta que crecí sola con una Mami que tuvo que trabajar arduamente para poder pagar mis estudios y cuya prioridad siempre han sido mis estudios).
Segundo; no me he tomado el tiempo de hacer locas maniobras para verme el c*lo y ver de qué color es, pero tengo la certeza de que no es rosado y si el término se refiere a rosado como el color de los fresas pues quienes llevan una campaña “rosa” no somos nosotr@s, sino el gobierno de “reconciliación”.
Con respecto a que somos “caras rosadas, cheles”, yo soy morena y ojos negros. Mmmm entonces seguramente no se refieren a mí, ¿verdad? Vámonos al norte de Nicaragua y veremos que la población, de Estelí por ejemplo, es blanca y de ojos claros y son 100% pinoleros. Es racismo venir con argumentos que hagan referencia hacia color de piel u ojos. Nuestro color no influye en nuestra manera de pensar, nuestra inteligencia, ni capacidades.
Luego; comprarme un perfume Chanel está fuera de mi alcance. Y aquí es cuando realmente la están regando. ¿Que acaso solo quienes tienen dinero huelen rico? Lo que están diciendo con esto es que la mayoría del pueblo nicaragüense, que es de muy escasos recursos, son una manada de apestosos y esto sí es una ofensa.
Déjenme entender entonces; según el canal 4 que es la voz de este gobierno, ¿un nica es pelo murruco, de piel oscura, que no le gusta arreglarse y de olor desagradable? ¡Noooooooooo hombre! Esto sí suena a ofensa.
Por último: ¡Oligarcas! Ve, yo también estoy en contra de la oligarquía. ¿Quiénes son los oligarcas de este país? Mi mamá no. Es una mujer con un empleo que se lo dio alguien más, no es jefa de nadie, ni tiene su empresa propia, ni mucho menos un capital tan grande como para poder influir en la política nacional a como se le antoje, cosa que es tarea de la oligarquía.
Cuando escuché las diversas formas de cómo nos llamaban, ni una me ofendió porque; ¡lo siento broder, no soy oligarca, ni chela, tengo el c*lo negro y a veces no me baño y huelo horrible!